lunes, 6 de noviembre de 2006


De mayor quiero ser…



“De mayor quiero ser…peluquero, maestra, oficinista, astronauta, bombero, bailarina,…”



De pequeños nuestros sueños siempre respondían a “jugar a ser mayor”, y ahora que somos mayores, ¿Somos quien queríamos ser?

Parece cómo que nunca estamos satisfechos con lo que tenemos, nuestros horarios son de miedo, nuestra vida se reduce al fin de semana, nos sometemos a mayor presión para conseguir un ascenso y cuando lo conseguimos, seguimos sin estar satisfechos,...

...¿ POR QUÉ? ¿Porqué en la infancia jugar a ser una maestra de escuela era tan maravilloso y en la edad adulta se ha convertido para algunos en un infierno? Ahora pensamos en la palabra aula y parece que directamente la asociamos con Bullyng, con terror entre el profesorado ( sonada noticia de la agresión a un profesor por requisar un paquete de tabaco a un alumno de 15 años ) y con terror entre el alumnado ( “Una niña de 13 años lleva una semana en su casa de Ponferrada, en León, intentando recuperarse de la rotura de tibia, peroné y tobillo que le causaron presuntamente tres compañeras de instituto al pegarla y tirarla al suelo.”)

Así pues, no sólo no tenemos lo que queremos sino que también parece que en esta vida, a veces, nos toca soportar lo que nunca hubiéramos deseado ni a nuestro peor enemigo. Con esta “teoría” tiramos por suelo el cuento de hadas que habíamos construido de niños y lo convertimos en un mal sabor de boca que se repite todos los días de nuestra vida.

Quizás, no tenemos lo que queremos porque sencillamente tampoco sabemos qué queremos. Conforme enviciamos más y más no disfrutamos de las cosas sencillas de la vida y cuando nos damos cuenta, hemos perdido el tiempo buscando otras pudiendo aprovechar las que teníamos cerca.

Bien, visto las dificultades que aparecen en el mundo de los mayores, lo mejor es buscar solución a los problemas que realmente lo necesitan ( hoy hemos anunciado ejemplos como el bullyng y anteriormente hablamos de mobbing), y no buscar problemas dónde no los haya.
Si NUNCA tenemos lo que queremos podemos buscarlo, pero nunca conseguiremos estar satisfechos. Si tenemos lo que queremos y con ello queremos más, quizás si que sabremos disfrutar de nuestras vidas y poco a poco, aprenderemos a mejorarlas.
Debemos aprender a mejorarlas pues, saludablemente y sin excesos, equilibrando nuestro entorno laboral, social, familiar y personal, buscando el control de nuestras vidas y evitando ser arrastrados por estados emocionales que corrompan esta homeostasis. De esta manera conseguiremos estar a gusto con nosotros mismos y creceremos personalmente en las distintas facetas de nuestra "carrera vital"




De mayor quiero ser....primero, quien soy ahora








Para vuestra información, Aquí teneis un link sobre un "juego de niños", un nuevo videojuego inspirado en el Bullyng:

http://www.elpais.es/articulo/sociedad/Llega/presunto/acosador/
elpportec/20061030elpepisoc_4/Tes/



Consulta privada Mª Teresa Mata, psicoterapeuta y fisioterapeuta.

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10 Comments:

At 5:47 p. m., Anonymous Anónimo said...

Teresa el artículo que has escrito hoy me ha dado mucho en que pensar. La verdad es que nunca me habia parado a pensar en que siempre hay que anelar querer ser alguna cosa en esta vida porque si no tienes alicientes y no tienes la escala de valores clara solo dejas que pasen los dias y la vida se va sin saber como y a la vez también cuesta que pase. Des de el punto profesional mi pregunta es : necesariamente tenemos que ponernos metas para sentirnos seguros, podrías esbozarnos unas cuantas reglas para conseguir ganar confianza en uno mismo. Gracias por todo M. Teresa.

 
At 9:57 p. m., Blogger El Divan Digital said...

Bien Blanca, en el artículo explicaba que es importante intentar superarse cada día, pero siempre pensando en todo aquello bueno que ya tenemos. No por querer acaparar más, hay que dejar a un lado lo presente.
Cada uno pone unas metas en su vida, metas más o menos lejanas, pero que ayudan a poner más empeño en la actividad diaria. todos tenemos metas en nuestra vida profesional ( por ejemplo, yo como psicóloga y fisioterapeuta tengo motivación por superarme y crecer en mis especialidades y en definitiva, hacer mejor mi trabajo cada día), en nuestra vida familiar, en nuestro propio ser, etc...NO HAY QUE HACER UNA LISTA DE TODAS ELLAS, simplemente querer "ser alguien de mayor" partiendo de quien ya somos ahora, y saber que la vida cambia y que las metas también cambian. Lo imporante es buscar motivaciones y si una desaparece, seguro que a la vuelta de la esquina aparece otra inesperadamente.
Uno siente confianza con uno mismo, no porque logre metas inalcanzables de oscar, sinó porque es feliz con aquello que se propone y poco a poco crece en todos los aspectos de su ser ( por ello el individuo es un ser BIO-PSICO-SOCIAL ).
Muchísimas gracias por tu intervención. Para la próxima semana publicaremos un post relacionado con el tema que planteas.

 
At 10:15 a. m., Anonymous Anónimo said...

Hola, quisiera preguntarte si una persona no tiene metas puede ser feliz, y su las metas que uno se propone , metas que en una persona cualquiera serian fáciles de alcanzar, no se llega nunca a alcanzarlas que hay que hacer, que pasos seguir, seria bueno escribir previamente lo que queremos conseguir. gracias m. teresa por ser tan buena profesional

 
At 10:57 a. m., Blogger El Divan Digital said...

@ Joan Cortina

Prácticamente todo el mundo tiene alguna meta a alcanzar. Estas pueden ser metas simples que surgen según las necesidades de la vida diaria, no necesariamente tienen que ser a largo plazo.
Las metas son personales e intransferibles, en el sentido que no hay que comparar si una meta es fácil para un individuo y difícil de conseguir para otro. Cada uno crea las suyas según una situación, un contexto, una personalidad, etc. Así pués, nunca una meta será igual a otra porque la persona que la persigue es distinta, y por ello no hay que compararlas.

"¿Si una persona no tiene metas puede ser feliz?"
Las metas nos motivan a seguir luchando por conseguir nuestros objetivos. Si no tuvieramos metas seria difícil levantarnos por la mañana, es prácticamente imposible que no tengamos ninguna implícita en nuestra actividad cuotidiana.

¿Qué ocurre si no alcanzamos una meta?

Como dije en el post, a veces nuestras metas desaparecen y quedan sustituidas por otras distintas...no siempre conseguimos aquello que nos proponemos, y no por ello hemos fracasado.

A veces las metas pueden ser retos necesarios para nuestra salud ( dejar una adicción por ejemplo). en este caso puede ser necesario escribir y planificar paso a paso el camino a seguir como tu cuestionas.



Gracias por tu intervención Joan, esperamos verte aquí en el Diván.

 
At 12:59 p. m., Anonymous Anónimo said...

M. Teresa he leido tu respuesta y me has convencido, la clave me la has dado tú con tu frase "las metas son personales e intransferibles" no me habia dado cuenta que lo que yo quiera hacer por insignificante que pueda parecer ante los ojos de otras personas para mi es un reto personal i si lo consigo gratificante. Tal vez el gran equivoco este en que siempre nos comparamos con los demás y que las personas que somos más debiles nos parece que nuestros objetivos son insignificantes; me has hecho entender que tener metas quiere decir estar vivo. Muchas gracias por todo nunca me habian hablado así, mil gracias

 
At 1:17 p. m., Blogger El Divan Digital said...

Gracias Joan. La semana que viene publicaremos un post referente a un instrumento importante para poder conseguir estas metas de las que estamos hablando...Cuando lo leas entenderas porque lo digo.

Os envío un cordial saludo

 
At 10:58 p. m., Anonymous Anónimo said...

hola, me gustaria haceros una pregunta acerca de este tema. Y si uno tiene metas en la vida, aspiraciones y ansía el poder hacer lo que le gusta(por ejemplo en el terreno laboral) pero está privado de esa libertad por culpa de la familia? me explico, soy una chica de 25 años y vivo en un pueblecito (se que lo primero que estareis pensando es que ya tengo cierta edad para hacer lo que me apetezca) y llevo toda mi vida ayudando en un negocio familiar. Tengo mis estudios, sacados con el sudor de mi frente porque tenia que estudiar por las tardes para colaborar en el negocio por las mañanas, no tengo ningún tipo de remuneración, tengo una pareja estable de fuera del pueblo, pues vive en otra ciudad(llevamos más de 4 años saliendo juntos y el pobre es demasiado paciente) y no encuentro la forma de decirle a mis padres que quiero irme a vivir con mi pareja y tener un trabajo digno, o al menos, remunerado.
Se que igual no encontráis sentido a lo que os estoy contando pero de verdad que esta situación me está agobiando demasiado y está afectando a mi sistema nervioso y a mi salud en general porque siento que traiciono a mis padres si les dejo solos y que además si les digo lo que pienso me van a echar a la calle y no van a querer saber nunca más nada de mi y no encuentro la manera de hablarlo porque además ellos tampoco son demasiado comprensivos, y como veréis bastante egoistas. Estaria muy agradecida si me dieseis unas pautas a seguir para poder hablar con mi familia, se que es dificil. gracias por adelantado.

 
At 12:28 a. m., Blogger El Divan Digital said...

Gracias Begoña por compartir tus preocupaciones con el Diván.

Es difícil romper con una rutina y establecer un CAMBIO importante en ella. Para tu familia la rutina ha sido durante muchos años luchar por su negocio y éste ha sido un pilar importante que ha dado sentido a sus vidas.

Ahora bien: ¿También da sentido a la tuya?
Tus objetivos son distintos y no se satisfacen con esta situación. Tu sabes QUÉ da sentido a tu vida, y por ello debes luchar. Tus padres puede que al principio no entiendan tu necesidad de independización familiar y laboral, pero con el tiempo deberán aceptarlo. El negocio es un pilar importante para sus vidas, pero indiscutiblemente TU también lo eres y es necesario que puedas contarles lo que sientes y que ellos te comprendan.
Estamos hablando de dos pasos difíciles pero no imposibles, que requerirán un tiempo de aceptación por las dos partes (ellos deberán aprender a trabajar prescindiendo de ti y tu deberás aprender a no sentirte culpable por escojer otro camino).

Entiendo tu preocupación. Es el miedo el que nos traiciona y no nos deja continuar con nuestro camino.
Tu conoces tu meta, tan sólo debes vencer el miedo para conseguirla. No "traiciones" a tu familia callando sinó ofreciéndoles tu verdadera felicidad.

Un saludo Begoña.

 
At 9:57 p. m., Anonymous Anónimo said...

Gracias M.Teresa por tu contestación, soy Begoña de nuevo y queria decirte que tu respuesta me ha animado bastante, o al menos me ha dado un poco más de fuerza para seguir luchando, aunque...
Verás, precisamente es el miedo a dar el paso lo que quiero vencer y no se como hacerlo.
Lo normal, pienso, seria coger un dia a mis padres, en el rato de la sobremesa o por la noche y porder sacar el tema abiertamente y explicarles la situación, lo que llevamos pensado hacer mi novio y yo, y que ellos me expusieran también sus miedos, que yo no dudo que los tengan, porque seguro que ellos también están preocupados por el futuro de su negocio, pero ese es precisamente el problema. Estoy convencida de que mis padres hablan entre ellos, mi novio y yo hablamos entre nosotros, pero ninguno somos capaces de dar el paso para hablar.
Te hablaré de el por qué yo no lo puedo hacer o al menos cuando pienso en que "ahora es el momento" me empieza a latir a toda prisa el corazón, empiezo a notar mareo, angustia, ganas de llorar y me echo atrás. Te explico, en mi familia no existe muy buena comunicación, porque no sabemos hablar, y aparte es que a mi madre cuando algo no le interesa soblo hace que gritarte y humillarte, si si, existe una especie de maltrato psicológico por ese lado, y solo con respecto a mí, porque no se si te he contado, que tengo un hermano, 9 años menor que yo (no se si recuerdas que tengo 27, aunque me de vergüenza decirlo) y para el todo es maravilloso, el puede estudiar lo que quiera, en el horario que quiera, se le permite no hacer nada en el negocio, ni en casa.... además EL es maravilloso. Te prometo que no estoy exagerando ni los más mínimo, es la realidad, y mi novio se pone enfermo cada vez que esta en casa porque no puede ver como me hablan o me tratan. No es siempre, pero a mi pocas veces o casi ninguna se me reconocen mis méritos y eso acaba por hundirte.
Luego, yo soy una persona muy débil de personalidad, no quiere decir que no tenga mi genio, pero en mi casa... es diferente, me acobardan, por no oirles pues apeteciendome ir a algún sitio, ni siquiera lo intento porque se que me van a echar la bronca... y yo creo que ellos se aprovechan de esa debilidad mia para salirse con la suya, incluido mi hermano, que se aprovecha de la situación de "soy el favorito" y hace lo que le da la gana.
Mi madre aprovecha cualquier situación para sacar el tema de que si yo me caso y me marcho que todo se irá abajo, que ella no sabe que va a hacer, que veas tú porque he tenido que buscarme un chico de fuera, que no se acostumbra a mis viajes (todo, porque cada 3 semanas, NO TE EXAGERO, me voy un viernes por la tarde después de trabajar a Madrid a verle y vuelvo un domingo, porque no me dejan ir con más frecuencia)en fin, cosas así tipo chantaje emocional...
Te he venido a contar todo esto,para en resumen hacerte unas preguntas.
Cómo puedo plantear el tema de que queremos casarnos, de que yo me voy a ir a Madrid a vivir y buscarme un trabajo de lo mio, pero que eso no significa que no volvamos a vernos nunca más, (que es lo que mi madre se piensa, aparte de que estoy segura de que le importa más el negocio que yo. Tengo miedo a hacerlo porque creo que me van a echar de casa, me van a prohibir volverles a ver, y me veo en otra ciudad sola (bueno con mi pareja que me apoya mucho), pero tengo miedo de caer enferma o algo así, si hago lo que quiero y luego sale mal...
Luego tengo otra duda, crees que tengo derecho a odiar a mi hermano? es que le estoy cogiendo una mania... y no se si el también tiene culpa de mi situación por no hacer nada para al menos ayudarme o simplemente se deja llevar porque le va bien y no tiene porque hacer nada.
Te parecerá increible lo que te estoy contando, pero creeme, es triste que en el siglo XXI ocurran estas cosas todavia, pero es mi familia y en el fondo, supongo, me importan, a lo mejor mucho más de lo que yo les importo a ellos,y no se como arreglar este problema que me atormenta.
un saludo
begoña

 
At 11:12 p. m., Blogger El Divan Digital said...

Muchas gracias Begoña por responder. Bien, sobre la pregunta que planteas:


"¿Cómo puedo plantear el tema de que queremos casarnos, de que yo me voy a ir a Madrid a vivir y buscarme un trabajo de lo mio, pero que eso no significa que no volvamos a vernos nunca más?"

En mi opinión el primer paso es afrontar el miedo y avisar a tus padres que algo te atormenta. Planteales la idea de que pueden vivir engañados o conocer tus verdaderos sentimientos y entonces, cuéntales cual es tu felicidad.
Explícales que no podrás vivir el resto de tu vida ayudando en el negocio familiar y comprométete a visitarles siempre que sea posible. Realmente, costará un esfuerzo veros si tu resides lejos del pueblo pero "negocia" los encuentros y diles que lo único que necesitarás para visitarles es escuchar un : "tenemos ganas de verte".

La idea de que puedes caer enferma si las cosas no salen bién, es una respuesta a tus inseguridades provocada por el miedo fundado durante todo este tiempo por el chantaje emocional que nos has contado. Está claro que tu familia no ha obrado bien transmitiendote miedos con el fin de que no les "abandones" y haciendo diferencias con su otro hijo. No debes odiarles por ello ni guardarles rencor, simplemente piensa que esto no está bien y actua como tu creas que debes actuar.
Darte cuenta de la realidad puede servirte de trampolin para lanzarte y hacer el cambio que tanto deseas. Aunque una parte de esta realidad sea la discriminación que has vivido con tu hermano, no utilices la ira que despierta este hecho para retroalimentar tu rabia; lo único que conseguirás es sentirte peor contigo misma.

Te animo a que reflexiones sobre todo esto, hables con tu pareja, busques la seguridad que necesitas en él y decidas CÓMO QUIERES VIVIR, sin miedo a los "efectos secundarios".

Nunca tenemos la certeza de que lo que haremos saldrá bien...pero tampoco tenemos la certeza de que lo que haremos sadrá mal.

Gracias otra vez por compartir tu caso. Esperamos volver a verte en el Diván.

 

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